lunes, 29 de diciembre de 2008

Dante Gullo: "Que algunos opositores exasperados se queden tranquilos y no tengan ánimo destituyente"


Así lo reclamó el diputado kirchnerista Dante Gullo, quien en entrevista con Télam recordó que en estos 25 años de democracia "el peronismo le puso el hombro a (el ex presidente Raúl) Alfonsín en las Pascuas (de 1987, con el alzamiento carapintada)". Además, afirmó que la Justicia "sigue siendo lenta" para juzgar los crímenes de la dictadura.

El diputado nacional (PJ) Juan Carlos Dante Gullo consideró hoy que los 25 años de democracia ininterrumpida en el país "marcan el comportamiento del ciudadano argentino de no sólo querer vivir en democracia sino también de no querer más interrupciones con golpes o actitudes destituyentes".

Entrevistado por Télam, Gullo, a cargo de la Secretaría de Derechos Humanos del consejo nacional del PJ, dijo que "el pasado todavía nos sigue marcando, por los crímenes de lesa humanidad y el genocidio" ocurridos durante la última dictadura militar, y en ese sentido señaló que "las muertes y los desaparecidos fueron siempre del peronismo".

Para el legislador, en la actualidad "hay algunos sectores que no cambian su forma de actuar", pero en general la sociedad "busca un país y una región que genere las condiciones de autodeterminación económica, política y social que aseguren el trabajo y el pleno empleo".

"Esto es para todos igual", consideró Dante Gullo, "para uruguayos y uruguayas, brasileños y brasileñas, venezolanos y venezolanas", ejemplificó, y agregó que cada país "debe darle muy fuerte su impronta, identidad, pertenencia y patrimonio, cada uno con su relativismo cultural".

En ese marco indicó que "nosotros tenemos una cultura y sufrimos los embates de quienes no entienden el peronismo como una expresión nacional popular y revolucionaria".

"Buscamos como sociedad ser autónomos, independientes", señaló Gullo, y añadió que "en los ’40 había un Estado benefactor que regulaba para preservar el ascenso de los más humildes".

Para el diputado la cuenta pendiente en la democracia es "generar la capacidad de ir trabajando en la transparencia política y en darle oportunidad de igualdad a todos hombres y mujeres, a nuevas expresiones y a ciertas minorías que buscan un lugar".

Recordó que en algunos de estos 25 años de democracia "el peronismo le puso el hombro a (el ex presidente Raúl) Alfonsín en las Pascuas (de 1987, con el alzamiento carapintada) y generó condiciones para no alterar el orden constitucional", y bregó para que "algunos opositores exasperados mantengan la tranquilidad y no tengan ánimo de ser destituyentes".

En ese contexto manifestó que tanto en el gobierno del ex presidente Néstor Kirchner como en el de la presidenta Cristina Fernández "hubo actitudes de destituir, poniendo ’palos en la rueda’ y provocando situaciones que socialmente no aceptamos".

Y apuntó a "algunos politólogos y grandes analistas elitistas que tienen maneras soberbias y autoritarias de expresarse", además de "clones de figuras políticas que en realidad son una comparsa y creen que son favorecidos".

Sobre el intento este año de desestabilización democrática en Bolivia, con la ’masacre de Pando’, Gullo expresó que "muchos países de la región son provocados para generar estas situaciones", y apuntó a "sectores elitistas, pero que también en otras épocas sufrieron el golpismo, las dictaduras, y la vulneración de las democracias".

Si bien aplaudió la reapertura de los procesos judiciales contra los genocidas de la última dictadura militar en el país, Gullo consideró que la justicia argentina "sigue siendo lenta" y en muchos casos "tiende además a mantener ciertos pliegues de oscuridad".

"Es como un papel carbónico para repetir estupideces", ironizó el diputado, "que no está a tono con la conciencia y el protagonismo, especialmente de jóvenes, que no quieren más golpear cuarteles".

Y fustigó que "el busto pintado de negro de Evita (en Entre Ríos) es una manera irracional de muchos sectores y una bronca que no se justifica".

lunes, 22 de diciembre de 2008

Que el 2009 nos encuentre unidos, hombro a hombro, en la tarea de construir la felicidad del pueblo y la grandeza de nuestra Nación













"La verdadera democracia es aquella donde el gobierno hace lo que el pueblo quiere y defiende un solo interés: el del pueblo."

Primera Verdad Justicialista



Las Fiestas de Navidad y Año Nuevo son un momento especial de reflexión, de reencuentro con los afectos, de anhelar que nuestros mejores proyectos se concreten.

Los grandes logros obtenidos en un año de gestión, así como la superación de serios obstáculos, siempre de cara al pueblo, trabajando de su lado, nos infunden toda la fuerza y el optimismo ante los nuevos desafíos por venir.

Envío mis mejores deseos para usted y sus seres queridos, con la firme esperanza de que el 2009 nos encuentre unidos, hombro a hombro, con sed de justicia y convicción democrática, en la tarea de construir -entre todos los argentinos de bien- la felicidad del pueblo y la grandeza de nuestra Nación.

Un fuerte abrazo, Juan Carlos Dante Gullo

viernes, 19 de diciembre de 2008

Dante Gullo: “La decisión judicial de liberar a los genocidas es una vergüenza para todos los argentinos y argentinas”


Dante Gullo inició una campaña pública de repudio a la decisión judicial de liberar torturadores y genocidas de la ESMA


El diputado nacional Juan Carlos Dante Gullo manifestó su enérgico rechazo a la resolución judicial que concede la libertad a “genocidas y golpistas que cometieron delitos de lesa humanidad” y convocó a toda la sociedad a trabajar “más que nunca por la verdad, la Justicia y la memoria”.

Dante Gullo coincidió con la Presidenta de la Nación en que dicho dictamen judicial “es una vergüenza para todos los argentinos y argentinas” y, en consecuencia, lanzó una campaña pública “en repudio de los genocidas, golpistas y destituyentes”.

En el mismo sentido, el Diputado Nacional expresó que “ante una actitud judicial que nos avergüenza, los argentinos debemos defender las políticas que se iniciaron durante el gobierno de Néstor Kirchner y que continúan hoy con la presidencia de Cristina Kirchner, para que los genocidas y perpetradores de delitos de lesa humanidad finalmente respondan ante la Justicia por sus actos".

jueves, 18 de diciembre de 2008

Dante Gullo: “Estas maniobras degradan la práctica política y erosionan la confianza popular en las instituciones”


Dante Gullo presentó un Proyecto de Resolución en repudio a la irregular maniobra de votos dobles efectuada por integrantes del bloque PRO en la Legislatura porteña

El diputado nacional Juan Carlos Dante Gullo presentó hoy un Proyecto de Resolución para expresar su repudio ante “la irregular maniobra de los votos dobles efectuada por legisladores porteños pertenecientes al bloque del PRO”.

El Proyecto enviado hoy al Congreso Nacional manifiesta que la práctica ejercida “degrada la práctica política, erosiona la confianza popular en las instituciones e instala un ejemplo deleznable en lo que hace al cumplimiento de las leyes”.

La iniciativa, que también cuenta con las firmas de Claudio Morgado y María Lenz, hace extensivo su repudio “a la irregularidad cometida por un legislador de la Coalición Cívica en la votación de beneficios impositivos que favorecen a un determinado tipo de empresas”.

Asimismo, exhorta a “la Legislatura porteña a rever las leyes que hayan sido aprobadas a lo largo del período 2009 por un escaso margen de votos”.

En los fundamentos del Proyecto se explicita que “las irregulares maniobras descriptas así como las declaraciones de los responsables políticos de quienes las protagonizaron:

1. Erosionan la confianza del Pueblo en las instituciones de la Democracia Representativa.

2. Insultan la salud republicana que, trabajosa y paulatinamente, se ha recuperado a lo largo de los últimos cinco años.

3. Instalan un mensaje deleznable en tanto que son los funcionarios públicos y los legisladores quienes tienen la máxima responsabilidad de dar el ejemplo respecto del cumplimiento de la ley.

4. Degradan la práctica política en general y nos retrotrae a los cuestionamientos populares al respecto, cuya máxima expresión se pagó con sangre argentina en las jornadas del 19 y 20 de diciembre de 2001”.






PROYECTO DE RESOLUCION

La H. Cámara de Diputados

1. Expresa su repudio ante la irregular maniobra de “votos dobles” efectuada el 4 de diciembre de 2008 por legisladores porteños, pertenecientes al bloque del PRO, en la sesión 33ª de la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en tanto la misma degrada la práctica política, erosiona la confianza popular en las instituciones, hiere la salud republicana e instala un ejemplo deleznable en lo que hace al cumplimiento de las leyes. Lo cual debe hacerse extensivo al aval brindado por el Presidente del Cuerpo a la irregularidad cometida por un legislador perteneciente a la Coalición Cívica en la votación de un Proyecto de Ley relativo a beneficios impositivos que favorecen a un determinado tipo de empresas.

2. Asimismo, exhorta a la Legislatura porteña a rever las leyes que hayan sido aprobadas a lo largo del período 2009 por un escaso margen de votos.



FUNDAMENTOS

El 4 de diciembre de 2008, durante la 33ª sesión ordinaria de la Legislatura de la CABA, se votaba un acuerdo de cooperación entre la CABA y la Provincia de Chubut. De los 26 diputados del bloque del PRO, menos de 20 estaban sentados en sus bancas. Sin embargo, a la hora del recuento de votos, se registraron 22 votos positivos de legisladores pertenecientes al PRO.

El proceso de votación fue filmado mediante un sistema de video de circuito cerrado. Las imágenes del mismo evidencian que dos diputados oficialistas (PRO) emitieron un voto dos veces cada uno. Tal como manifiesta el periódico “Crítica” (13/12/08, pp. 4), “una vez por ellos y la segunda en la banca de otros compañeros que no estaban sentados”.

Los legisladores involucrados fueron Oscar Moscariello y Silvia Majdalani quienes emitieron su segundo voto en lugar dos legisladores pertenecientes a su bloque. Posteriormente (“Crítica”, 16/12/98, pp. 7), se evidenciaron otros dos casos similares a los ya descriptos. Los legisladores macristas Carlos Araujo y Fernando de Andreis pulsaron, además de los suyos, los botones correspondientes a Enzo Pagani y Marcelo Godoy.

De acuerdo con el reglamento de la Legislatura porteña, el voto de cada legislador es estrictamente de carácter personal -es decir, no puede delegarse bajo ninguna circunstancia-. Por su parte, según el Código Penal, este tipo de maniobra podría tipificarse como un delito contra la administración pública.

De hecho, el Código Penal expresa textualmente: “será reprimido con prisión de un mes a un año e inhabilitación especial por el doble de tiempo el funcionario público que ejerciere funciones correspondientes a otro cargo”. El acontecimiento sería asimilable -en términos éticos más allá de las figuras penales que correspondan- al protagonizado por un funcionario público que firma una Resolución en lugar de aquel a quien le corresponde firmarla e imitando su firma, independientemente de que el segundo esté en conocimiento o no del hecho. Y esto es tan evidente que, por ejemplo, en la Cámara de Diputados de la Nación resulta necesario que el diputado, a la hora de emitir su voto, se identifique con su huella dactilar.

Por otra parte, en el transcurso de la ya mencionada sesión 33ª, se aprobó un Proyecto de Ley el cual estableció la creación de un polo tecnológico a desarrollarse en los barrios de Parque Patricios y Nueva Pompeya. Las empresas que allí se radiquen tendrán una exención de impuestos. La oposición cuestionó el inciso “K” del artículo 2° mediante el cual se determinaba que los beneficios impositivos alcanzaran a las empresas denominadas “call centers” (centros de respuesta telefónica a los clientes de empresas de servicios) ya que las mismas no desarrollan tecnología. La votación en ese punto resultó empatada en 27 votos a favor y 27 votos en contra. Diego Santilli, legislador perteneciente al PRO y presidente del cuerpo, desempató la votación y anunció que el inciso “K” había sido aprobado. Pero en el recinto no había 54 diputados sino 55. Ello se explica -y se evidencia en el mismo video en el cual se ven los “votos dobles” de los legisladores del PRO- porque el legislador Guillermo Smith (Coalición Cívica), a la hora de votar no hizo nada. Es decir, no votó en contra, no votó a favor y tampoco manifestó su abstención con lo cual violó lo estipulado por el Reglamento de la Legislatura. Al respecto, el periódico “Crítica”, (13/12/08, pp. 5) expresa: “El ‘voto distraído’ de Smith no pasó inadvertido: fue el único legislador de la Coalición Cívica –y de toda la oposición- que no votó en forma negativa. Si lo hubiese hecho, los call-centers hubiesen sido excluidos de la ley. Con su maniobra estarán exentos del pago de Ingresos Brutos”. Frente al reclamo de legisladores que advirtieron la maniobra, el presidente del cuerpo, Diego Santilli, admitió que Smith no había votado pero desestimó el hecho, con lo cual avaló la irregularidad que, en la práctica, favoreció las intenciones del Bloque PRO respecto de beneficiar económicamente a los “call-centers”.
Independientemente de las evidencias fílmicas -o tal vez por ello-, dos de los legisladores mencionados reconocieron públicamente su responsabilidad. Un cronista del periódico “Crítica” (13/12/08, pp. 5), luego de escuchar una serie de justificaciones tendientes a minimizar la gravedad del acontecimiento por parte de Oscar Moscariello, le preguntó: “¿Pero se da cuenta de que es una irregularidad?”. Moscariello respondió: “No te lo puedo negar (…) Va a generar un escandalete (sic)”. Por su parte, Silvia Madjalani, respecto de la “delegación” de su voto por parte de otros compañeros de su bancada, afirmó que los mismos le decían “Turca, votame”. Estas declaraciones no sólo demuestran mucha frivolidad y un marcado desprecio por las normas que rigen el sistema democrático representativo, sino que también inducen a la sospecha respecto de la autenticidad y legalidad con las que fueron aprobadas otras leyes impulsadas por el PRO.

En relación con el acontecimiento descripto precedentemente, en el Juzgado Correccional Nº 9, el abogado Javier Miglino radicó una denuncia contra Oscar Moscariello y Silvia Madjalani por la “presunta comisión del delito de usurpación de identidad, delito contra la administración pública, tipificado en el Art. 246 inciso 3ero. Del Código Penal”.

Sin embargo, esta no ha sido la única reacción frente al hecho protagonizado por los diputados del PRO involucrados en la irregularidad. Declaraciones efectuadas tanto por miembros del oficialismo como provenientes de diferentes sectores del arco opositor resaltan la gravedad del hecho. La dirigente de la Coalición Cívica Margarita Stolbizer afirmó: “La votación trucha dejó al descubierto que el macrismo no tiene la seriedad ni la transparencia de conductas que la sociedad necesita. No hay diferencia entre lo que hace el PRO y el diputrucho menemista” (P12 del 15/12/08, pp. 5). Para Martín Hourest, del bloque Igualdad Social, “esto es la expresión de un proceso de degradación institucional de la Legislatura, que tanto en las formas de votar como en lo que se vota pareciera encuadrarse en una lógica del todo se compra-todo se vende”. (ib. ant.). Por su parte, la diputada nacional de la UCR Silvana Giudice expresó: “Es grave y preocupante que justo en la semana que se celebra el 25º aniversario de la democracia aparezcan emuladores del menemismo, que acuñó la plabra diputrucho” (ib. ant.). Por último, el máximo dirigente de la Juventud Peronista y legislador porteño Juan Cabandié dijo: “Este es un claro ejemplo de lo que representa el macrismo. Por un lado se venden como la nueva política y como hombres de gestión, cuando en realidad llevan adelante prácticas obscuras al mejor estilo del diputrucho menemista. Representan lo peor de la vieja política” (ib. ant.).

No resultan menos preocupantes para la salud republicana las declaraciones de los más importantes dirigentes del PRO. Federico Pinedo, jefe del bloque PRO en la Cámara de Diputados de la Nación, declaró a “Crítica” (16/12/08): “Si están los botones hay que apretarlos y a veces los políticos se van de mambo”. Por su parte, frente a los micrófonos de Radio Continental, Mauricio Macri, en su afán por justificar las irregularidades cometidas por los legisladores de su partido, afirmó que las sesiones de la Legislatura porteña son “maratones en las que nadie escucha (…) si corresponde que se vote de nuevo, o un apercibimiento, es un tema que debe definir la Legislatura ”, y prometió que “a partir de ahora este bloque será riguroso en respetar el reglamento” (“Clarín”, 16/12/08, pp. 10). Ante estas afirmaciones, no queda otra opción más que preguntarnos: y antes de ahora, desde hace prácticamente un año…¿QUE?. Es válido preguntarnos ¿cuántas leyes favorables a las políticas del PRO en la CABA fueron aprobadas mediante maniobras irregulares?.

Por nuestra parte, entendemos que las irregulares maniobras descriptas así como las declaraciones de los responsables políticos de quienes las protagonizaron:

5. Erosionan la confianza del Pueblo en las instituciones de la Democracia Representativa.

6. Insultan la salud republicana que, trabajosa y paulatinamente, se ha recuperado a lo largo de los últimos cinco años.

7. Instalan un mensaje deleznable en tanto que son los funcionarios públicos y los legisladores quienes tienen la máxima responsabilidad de dar el ejemplo respecto del cumplimiento de la ley.

8. Degradan la práctica política en general y nos retrotrae a los cuestionamientos populares al respecto, cuya máxima expresión se pagó con sangre argentina en las jornadas del 19 y 20 de diciembre de 2001.

Por todas las razones expuestas solicito a nuestros pares que acompañen el presente Proyecto de Resolución.

jueves, 11 de diciembre de 2008

Dante Gullo: “No podemos permitir que en esta ciudad desde hace un año se esté queriendo provocar la caída de la escuela y la salud pública"


Una gran cantidad de jóvenes, muchos de ellos militantes, participaron ayer del ciclo de análisis “Una mirada a Buenos Aires desde el Proyecto Nacional” en la que expusieron el diputado nacional Juan Carlos Dante Gullo, el legislador porteño Juan Cabandié y el secretario general de La Cámpora , Andrés Larroque, en el auditorio de La Manzana de las Luces.





Exposición del Diputado Nacional Juan Carlos Dante Gullo en el ciclo Una mirada a Buenos Aires desde el Proyecto Nacional:



“Las políticas a nivel nacional están en marcha pero hay que explicitarlas y trabajarlas en lo que es la realidad de Buenos Aires. A Buenos Aires hay que provocarla por la positiva, todos los días tenemos que ser sinceros con nosotros y con esta realidad. Y ser sinceros con nosotros significa cómo nos acercamos a nuestros vecinos y vecinas para expresar lo que estamos rumiando: una ciudad que da más, una ciudad que no está a tono con las políticas nacionales, que está en manos de la derecha, en la que además se percibe un humor donde no hay disposición para la discusión detallada. Yo creo que en el 2.009 esto tenemos que darlo vuelta como una media y en el 2.011 tenemos que ir por todo”.



“Si uno analiza las políticas, las iniciativas del Poder Ejecutivo Nacional y lo compara con el gobierno del macrismo, hay mucho para separar, diferenciar, comparar, desechar y, obviamente, impulsar. Nosotros en este momento estamos haciendo todo lo posible y lo imposible para que el pleno empleo sea el eje de la política nacional, para que la preservación del empleo, los salarios reales y la calidad del trabajo signifiquen el eje sobre el cual la Argentina va a afrontar y darle respuesta a una situación inédita a nivel internacional, que por ahora nos encuentra con margen de maniobra”.



“Yo a veces recibo consultas de vecinos para solucionar alguna situación y les pregunto: ¿A quién votaste? Y me reponden: Bueno, yo creía que con Macri... Ah, vos creías, entonces andá y golpeale la puerta. Hay que romper la inercia, vos no podés ir la ventanilla de la nación y, después, porque tu novia o tu novio estudia en la universidad privada, jugar a que sos liberal, a que protestás, que los K no sé qué cosa, que el populismo y la demagogia, pero después cuando llega la noche decís: cómo hago para enganchar alguien que mañana me tire un mastiquín. ¿Ah, querés un mastiquín? Vení ahora a la noche, discutamos y generemos todas las demandas y reclamos que signifiquen sinceramiento”.



“La militancia es un sinceramiento y esto es lo que nos falta a nosotros, a los que tienen edad y a los que tienen menos edad. El sinceramiento en la militancia son objetivos y los objetivos son las cosas que definimos que tenemos que hacer”.



“Yo soy un compañero que discuto el comportamiento de la ciudadanía de Buenos Aires o el humor de la gente de Buenos Aires. Yo hice siempre política en Buenos Aires, vivo en el mismo barrio, en la misma cuadra, en la misma casa y, honestamente, no me fue mal. Hablándole de frente a los vecinos y vecinas, a los compañeros y compañeras, a los chicos y a las chicas, porque es mentira que esta ciudad es conservadora, es mentira que esta ciudad, más allá de la profundidad que pueda significar el humor, no reacciona. Los que me parece que estamos un poquito fuera de esto, de decir comencemos a generar ideas y proyectos y a definir instancias de transformación, somos nosotros”.



“Creo que estamos en un momento en que cada uno de nosotros debemos estar muy atentos, si es necesario debemos trabajar 24 horas por día, todos los días de la semana y todas las semanas del mes. Y este verano, me parece que salvo alguna distracción hay que estar al pie del cañón, no podemos permitir que en esta ciudad, desde hace un año, se esté queriendo provocar el desarme, la caída, de la escuela pública y de la salud pública”.



“Que no nos vengan con excusas de que a los hospitales de la ciudad se vienen a atender compañeros de la provincia, porque no es una excusa, es una demostración de la maldad e insensibilidad de los tipos que instrumentan estos argumentos. A mí me duele cuando escucho que en nuestros hospitales la calidad es mala porque tienen que atender gente de la provincia. De la misma manera que me duele y me pone mal cuando explican que nuestros hospitales atienden compañeros o ciudadanos, hombres y mujeres de los países limítrofes. Qué miseria, es una postura miserable, cuando hoy tendríamos que implementar una política de salud pública que signifique para la región metropolitana la posibilidad de una atención excelsa, porque tenemos hospitales, tenemos personal, tenemos profesionales y tenemos un patrimonio de décadas de conocimiento, de prevención y de curación que nos tiene que hacer sentir orgullosos”.



“Aunque algunos sectores y cierta prensa hostiguen diciendo que atendemos a hombres y mujeres de países limítrofes, ¿Qué mejor que Buenos Aires sea la capital cultural y de atención de la salud del Mercosur o de Latinoamérica? Y, además, que podamos hacer excelsa esta posibilidad y abrirnos con seriedad, con profesionalidad, con inteligencia, a todos los países limítrofes. Y, obviamente, si esto lo trasladamos a la educación pública, pasa lo mismo”.



“Desde que comenzó el gobierno de Macri, primero empezaron a jorobar a los padres y a las madres con el tema de las cooperadoras, sin tener en cuenta que en los años de crisis muchos papás y mamás desde las asociaciones cooperadoras sostuvieron algunos comedores y se organizaron para superar muchos inconvenientes. Después, avanzaron sobre las becas, generando malestar en chicos y chicas que con las becas reciben un pequeño aporte para asistir a la educación y no perder su posibilidad de estudio y capacitación. Y después fueron por más: provocaron una situación de conflicto por el salario de los maestros y las maestras, profesores y profesoras. Todo esto en un año. Un año tratando de debilitar tanto la salud pública como la educación pública”.



“¿Por qué hacen esto? Porque tienen complicidades, porque no miran las necesidades de los barrios del Sur, o del Centro, donde los chicos y chicas requieren mayor asistencia. Ellos miran al Norte. A Macri, a este gobierno, no le interesa la escuela pública, no le interesa la salud pública, porque hay cierta franja que todos los días repite la monotonía de ese primer mundo superficial, frívolo. Porque ellos están pensando en la escuela privada, en las prepagas, en los sanatorios, que no lo discutimos, pero generamos leyes que determinan que eso no sea elitismo para pocos en función del avasallamiento de muchos”.



“¿Y nosotros en qué pensamos? ¿Vamos a jugar al progresismo de ocasión que quiere quedar bien con algunos titulares y con cierta franja de humor de clase media, clase media alta? ¿O vamos a ir nuevamente a la verdad de la cultura, a la verdad de las políticas, a la verdad de las propuestas, a la verdad de lo que es ser hacedor de la tarea pública? Entonces, aunque enfrente haya una circunstancia de humor de diez y acá sea uno, hay que dar la discusión. Y aunque enfrente parezca que está cerrada la posibilidad de generar políticas serias, con tranquilidad, yo insisto, volvamos a las fuentes, vayamos a provocar a esta ciudad, provoquemos esta ciudad con calle, timbre, casa por casa”.



“No puede ser que después de lo que pasó, con esto que yo describo, después de un año, no estén ahí los jóvenes secundarios peronistas generando las convocatorias a los padres, a las madres, a los chicos y chicas, a los maestros, a los profesores y a las profesoras, ¿qué nos pasa? No puede ser que en un año en que se está destruyendo la salud pública y además se arremete con tanqueta, no solo sobre la Villa 31, sino sobre lo que son estos pilares, nosotros no estemos hospital por hospital generando la mayor posibilidad de discernir con los trabajadores de la salud, con enfermeros y enfermeras, con el personal de los hospitales, con los familiares angustiados, la posibilidad de decirles cual es nuestra propuesta sobre la salud”.



“Desde que comenzó el gobierno de Macri comenzaron las turbulencias. Nombraron a un Secretario de Cultura y a los diez días lo tuvieron que remover; intervinieron la obra social de los municipales, a la semana tuvieron que rebobinar y hoy no sabemos si esto va para allá, para acá, o por dónde va”.



“Demos la discusión, demos la pelea, hagamos una movilización, agarremos nosotros la cacerola y metámonos en el Teatro Colón. Está cerrado el Teatro Colón. Compañeros, compañeras, qué nos pasa. En esta ciudad de Buenos Aires que nos jactamos de ser un foro de la cultura, donde estamos abiertos al turismo, un turismo cada vez más propenso a la calidad integral para disfrutar de la ciudad, nos demos el lujo de matar al Colón. Qué nos pasa”.



“Yo creo que si no partimos de nosotros, de preguntarnos qué nos pasa y dónde estamos parados, me parece que erramos la cosa. Porque en esta ciudad no es solo Macri, es Macri y son muchos que meten mano, es ese humor del que hablamos, es el comportamiento de un sector social al que hay que darle la discusión y la pelea. Nos tienen que explicar por qué esta inteligencia argentina, que se escribe con zeta, que se cree culturosa, que además a nosotros nos corren por negros, por peronistas y por impresentables, acepta que desde hace un año se esté destruyendo una de las cosas más preciadas en Buenos Aires y en la Argentina que es el Colón. Que nos digan por qué”.



“Alguien dijo hoy que Macri viajó a Milán para asistir a una ópera. Está cerrado el Colón y qué hace el Jefe de Gobierno, va a Milán a la Ópera de Milán. Porque de chiquitos, a nosotros los excluidos, a nosotros los de los barrios, a nosotros los que somos hijos de trabajadores, nos presentaban que la gran ópera era la de Milán. Y cuando Perón abrió el Teatro Colón para los recitales, para todos y para todas, era criticado. Esa política sigue persistiendo hoy por hoy”.



“Es la diferencia entre un proyecto popular, nacional, de inclusión, integrador, y un proyecto que es excluyente, elitista, soberbio, pero por sobre todas las cosas es bárbaro, son incultos. Esta es la provocación que tenemos que dar. Ellos son los que cierran escuelas, ellos son los que atentan contra la escuela pública, contra la salud pública, contra la cultura en todas sus formas. Es la historia del conquistador que al pobre indio le tira unas piedritas de colores y, obviamente, les robaban hasta el alma y su sangre. Estas cosas siguen de alguna manera en vigencia, pero a nosotros piedritas de colores no”.



“Creo que con seriedad tenemos que generar el cauce de participación de las nuevas generaciones, hay que mover el banco de suplentes. Ustedes tienen que imponerse de acá a un año, de acá a tres años, tienen que ser la construcción de la ciudad de Buenos Aires”.



“La ciudad de Buenos Aires tiene que ser un faro excelso de salud, de educación, de cultura, de urbanización y, a nivel de la región, acompañar no solo al área metropolitana sino a cada una de nuestras provincias. La ciudad de Buenos Aires no tiene que estar de espaldas y cerrada, sino de frente y abierta a todos nuestros países latinoamericanos, a todos, cualquiera sea su condición”.



“La ciudad de Buenos Aires, junto a la Argentina , tiene que significar justicia social,

Legislación laboral de avanzada, tiene que ser un lugar para vivir en paz, integrados, y en esto también hay que animarse, juega la seguridad, tenemos que propender a vivir en paz y aprovechar completamente y sin problemas los espacios públicos”.



“Ahora todo esto hay que construirlo, no nos lo van a regalar, y yo insisto, hoy hay una realidad que parece esquiva y dura pero también hay una realidad que parece cuña y es yunque y martillo, eso somos nosotros, apliquémoslo. Ganemos provocando a nuestros vecinos y vecinas, ganemos provocando a la juventud, ganemos provocando donde haya alguien que tiene que hacerse carne de estas ideas, entonces en el 2.009 es posible ganar la ciudad nuevamente”.



“Hoy hay muchos aliados y amigos que son muy agoreros, muy llorones, y yo creo que hay que cambiar esto, generar un nuevo ánimo, el ánimo de la normalidad del que cree que va a triunfar, el ánimo de los que creemos que vamos a triunfar con verdad, sudando la camiseta, pero teniendo la satisfacción de dar la bienvenida al éxito, qué bueno que ganamos”.



Juan Carlos Dante Gullo en La Manzana de las Luces, 9 de diciembre de 2008.





Por su parte, el legislador de la Ciudad de Buenos Aires, Juan Cabandié, expresó que “Nosotros le podemos dar un aire nuevo a la ciudad, necesitamos enamorar a los porteños y a las porteñas y sabemos cómo porque tenemos el antecedente de la transformación nacional”.



“Tenemos que tener la fuerza militante para que cada día, ahí donde nos encontramos, en cada lugar, en todos los barrios, en especial en esta bandera que es el Sur de la Ciudad de Buenos Aires, para llevar la buena noticia de que tenemos la experiencia, la capacidad, las convicciones y la fuerza para transformar la Ciudad ”.



Cabandié también hizo referencia a algunos actores políticos que formaron parte del proyecto kirchnerista pero hoy se muestran críticos: “Creo que nosotros tenemos que tener la capacidad de entender que este es un proceso de depuración, que los que no están, que vayan, que les gane el egocentrismo por sobre los proyectos colectivos, nosotros tenemos la certeza, la convicción y la esperanza que a este Distrito hay que inundarlo de políticas nacionales, populares, como la que hizo Néstor Kirchner y como la que está haciendo la Presidenta actualmente”.



El legislador también expresó su desacuerdo con las políticas del macrismo: “Cuando se inunda la avenida Juan B. Justo por falta de obras, de los viaductos, el arroyo Maldonado, a nosotros nos apena, nos duele, porque Mauricio Macri en campaña inundaba los medios diciendo que iba a construir desde el día uno viviendas para suplir el déficit habitacional y no ha construido una sola vivienda”. Al mismo tiempo, destacó la gestión nacional: “Hay algunos que ven la pobreza desde el lado de la dificultad estética pero a otros nos duele y es por eso que a nivel nacional nosotros construimos 300.000 viviendas beneficiando a más de 1.200.000 argentinos, cómo no vamos a poder implementar estas ideas de gestión en la ciudad de Buenos Aires”.



“Tenemos que dar vuelta este escenario político que empezó a gotear -agregó Cabandié-, porque hay algunos medios que tímidamente se van animando a esgrimir en sus editoriales las verdaderas dificultades de subejecución, de prebenda, de entrega del patrimonio, de transferencia del patrimonio de la ciudad hacia el sector privado, pero la política no se gana desde los medios de comunicación, no tenemos que descansar, esta política se revierte con actitud militante, en las escuelas, en las universidades, en los hospitales, en el trabajo, en las empresas, en la administración pública, para que entre todos generemos una opción distinta, renovadora”.



“No podemos permitir que se conforme, se engañe y se menosprecie al electorado porteño asfaltando calles, poniendo cunetas, poniendo baldosas, porque la salud, la educación y la limpieza de la ciudad son elementos centrales para que estemos mejor los habitantes de este distrito”, concluyó.





En tanto, el secretario general de La Cámpora , Andrés Larroque, que fue el encargado de abrir las exposiciones, expresó que: “Macri está dejando claro que él es un empresario, que lo único que le importa es el negocio, beneficiar a las empresas, y ha generado un escenario político en la ciudad que se vuelve a abrir, por eso desde La Cámpora creemos que este es el momento de salir a la cancha y empezar a pelear en la ciudad, porque las elecciones del año que viene van a ser una disputa estratégica para saber cual es el peso del Proyecto Nacional”.



Larroque, además, destacó la importancia de comenzar el trabajo territorial en vista a las elecciones del año que viene: “ La Cámpora fue hasta ahora un espacio que siempre apareció en la disputa de lo nacional, ahora es importante que vayamos enfocando en cada territorio e ir a la disputa de cada ciudad, de cada pueblo, de cada lugar porque es allí donde se definen las cosas”.

martes, 9 de diciembre de 2008

Dante Gullo califica de próspero el viaje de Cristina a Rusia

La presidenta visita ese país con parte de su gabinete y más de cien empresarios

El diputado nacional por el FpV, Dante Gullo, opinó que el viaje de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner a Rusia es muy importante para “abrir nuevos mercados”. “A veces no se refleja con seriedad lo que estamos haciendo como gobierno, que es muy meritorio. Hoy la apertura con países importantes del mundo significa una necesidad para Argentina que nos da otro margen de maniobras”, sostuvo.

El legislador declaró que el paquete de medidas para enfrentar la crisis, “va a dejar más margen, para intensificar y promocionar empleo, mantener salarios reales, acudir, asistir a todos aquéllos que desde la producción tienen que seguir creciendo, como las pymes”.
“Argentina, lo anunció la presidenta en la UIA y la Unión de la Construcción, está disponiendo de casi más de 24 mil millones de dólares para evitar cualquier aspecto recesivo”, indicó.

("Yendo del trabajo a casa", de lunes a viernes de 19 a 20 hs., AM 1270)

http://www.amprovincia.com.ar/noticias/detail_noticia.asp?id=3470&seccion=1

Dante Gullo: “Nosotros no emitimos, inyectamos dinero real para promover la economía real”

En declaraciones realizadas en el programa Hora Clave, conducido por Mariano Grondona, el diputado nacional Juan Carlos Dante Gullo expresó que el paquete de medidas económicas enviado por el Gobierno al Congreso no están basadas en la emisión de dinero: “En los países centrales estas cifras son emisión, pero nosotros no emitimos, es dinero real, para promover la economía real. Cuando sucedieron las crisis Tequila o Caipirinha, etcétera, los gobiernos de turno, aplicando las políticas neoliberales de los gurúes tuvieron que emitir y produjeron un déficit en el PBI del 13 por ciento. Ahora, nosotros podemos inyectar en la economía real, de un mercado real, este volumen de plata y no va a haber déficit. ¿Por qué no discutimos estas cosas? Tenemos que plantear de cara a la sociedad las cosas que suceden”.


Dante Gullo indicó que: “La situación del país está sincerada: el mismo día que la Presidenta anuncia 13.200 millones de pesos en función de incentivar demanda y consumo, Zarkozy anuncia en Francia un plan muy similar, casi igual, porque apuntala automotrices y construcción por 32.900 millones de dólares, Alemania también pone en marcha un plan de 39.300 millones de dólares, España lanza un plan que orilla los 33.200 millones de dólares, Gran Bretaña hace un plan de 28.900, y hoy usted (Mariano Grondona) hace una editorial en la que anuncia:

-No sé si en los 71.000 y pico de millones de pesos en función de obras públicas están éstos 13.200. Yo le confirmo que no, no están. Y si usted suma 71.200 millones, más 13.200 millones, eso es un volumen en millones de pesos, que cuando se saca la cuenta en dólares da un resultado de 24.000 y pico millones de dólares. En una realidad con una población distinta, con una situación de crisis distinta y con una estabilidad distinta. Hay que informar”.


Además, el diputado del Frente para la Victoria manifestó que: “Este paquete de medidas está explicitando la iniciativa y la seriedad del Gobierno: primero es la normalización tributaria, luego la promoción y protección de lo que es el trabajo registrado, fundamentalmente de las Pymes, y también está la posibilidad de explicitar o repatriar capitales. Hace una semana leía un titular que me llamó la atención en el diario La Nación: desde el 2003 han vuelto a la Argentina más de 600 científicos e investigadores con lo que esto significa. Ahora, si alguno de esos compatriotas en el exterior tenía una suma de dinero que no había declarado ahora podrá traerlo. Y hoy leí en el diario que en España hay una promoción para que muchos inmigrantes regresen a sus países y ya hay anotados unos 5000 argentinos para volver. ¿Qué vamos a hacer con esos compatriotas?”.


Con respecto a las expresiones de la oposición, Dante Gullo señaló que: “Me parece que la oposición está haciendo un mal manejo de este paquete de leyes, creo que hoy el mundo y la Argentina enfrentan una situación muy particular, excepcional, y si no tenemos en cuenta esta situación excepcional no podemos debatir con seriedad. Porque yo no voy a permitir que Adrián Pérez me diga a mí que estamos fomentando a los narcos, me parece una ofensa, una ofensa a los argentinos, al Gobierno, a muchos de nosotros y, honestamente, no me parece que tenga seriedad, hay situaciones más delicadas, más serias, porque además, no inventamos nosotros que nuestros compatriotas, culturalmente, durante muchos años, hayan expatriado más de 150.000 millones de dólares enviándolos al exterior”.


En consecuencia, el Diputado agregó que: “Nosotros estamos dispuestos a comprender una nueva situación que vive el mundo y que hay gente que quiere repatriar sus capitales. Yo a esos compatriotas, que obviamente no viven en mi barrio, no les voy a cerrar las puertas, les voy a generar las condiciones para que tengan la confianza de poder venir nuevamente a la Argentina y le voy a decir, esto lo sabe Adrián Pérez y la oposición: en términos de declaración tributaria traigan la plata, luego siguen otras instancias que son mecanismos sólidos en el mundo y en la Argentina: si ese dinero es mal habido van a surgir situaciones penales o conflictivas. Entonces, aquel que trae el dinero sabe lo que va a pasar”.


“Nosotros somos los abanderados de lo que es el reparto igualitario -definió Gullo-, nosotros somos ideológica y políticamente aquellos que queremos que todo el mundo tribute y en función de esa tributación se reparta. Pero hoy hay una situación de crisis y conflicto donde hay que gobernar en función de lo que es nuestra idiosincrasia, el comportamiento de los sectores y la realidad”.


Finalmente, Dante Gullo afirmó que: “El Gobierno tiene que gobernar: hay un trabajo intenso en las comisiones, allí Moroni explicó seriamente muchas de las dudas que expresa la oposición y el artículo 32 se comenzó a trabajar y a reformar. Además, otra buena noticia en relación a los reclamos de la oposición, es que Moroni comenzó a estudiar mutuales e instancias que significan evasión. Hay un controlador distinto a nivel de el dinero que ingresa a la Afip para que no se evada por otro lado. Hay seriedad en las temáticas que se están abordando y hay propuestas”.



Declaraciones realizadas en el programa Hora Clave, canal C5N, conducido por Mariano Grondona, el domingo 7 de diciembre de 2008, a las 21:30 hs.

“Si es necesario, trabajaremos todo el verano”


Con esa frase concluyó un debate entre el diputado oficialista Juan Carlos Dante Gullo y el de la Coalición Cívica Adrián Pérez, donde se discutió el paquete de medidas anticrisis anunciado por el Gobierno.

El diputado kirchnerista Juan Carlos Dante Gullo y el titular del bloque de la CC, Adrián Pérez, confrontaron en el programa Hora Clave, que se difunde por C5N, en torno a las medidas anunciadas por el Gobierno nacional la última semana.

En ese marco, el legislador opositor cuestionó muy duramente las características del plan, pero fundamentalmente el blanqueo de capitales promocionado por el Gobierno. Desde la otra vereda, el diputado Gullo defendió la medida y puso énfasis en resaltar las características de la necesidad de la moratoria implementada, como así también la inyección de dinero para financiar el consumo anunciada esta semana.

Pérez prefirió dejar de lado la cuestión de la moratoria, que la remitió a otro plano, y prefirió enfocar sus críticas en el blanqueo, advirtiendo además que el titular del bloque oficialista, Agustín Rossi, dijo en la anteúltima sesión que “ahora va venir un proyecto con cuestiones que no vengamos a discutir si son morales o no”, a lo que Pérez aclaró que “no se pueden discutir leyes inmorales”.

El legislador de la Coalición Cívica aclaró que no era suficiente el tiempo que se le había dado a la discusión de las últimas leyes, a lo que Gullo replicó que en todo el mundo se están decidiendo las cosas aceleradamente para enfrentar la crisis, poniendo como ejemplo la situación de Estados Unidos, cuyo Congreso “sesionó dos veces una misma semana para aprobar un paquete de 600 millones de dólares”.

A ello replicó Pérez diciendo que sólo dos días se habían habilitado en comisión la discusión por el blanqueo de capitales.

“Si es necesario vamos a sesionar todo el verano”, advirtió Dante Gullo. “Si es necesario, vamos a trabajar 24 horas”, insistió, justificándolo en el tenor de la crisis.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

Diputados aprobó y giró al Senado la prórroga al impuesto al cheque


Foto: El diputado nacional Juan Carlos Dante Gullo, al centro, aplaude junto a otros legisladores del Frente para la Victoria la aprobación en general a una iniciativa.

La Cámara baja dio luz verde esta tarde a la iniciativa por 137 votos a favor contra 93 negativos. Antes y al cerrar su exposición, el titular del bloque del FPV, Agustín Rossi, aseguró que con las prórrogas de los tributos "no estamos aumentando ni generando un nuevo impuesto". Ahora, debaten la Emergencia económica.


La Cámara de Diputados aprobó hoy en general la prórroga de un conjunto de impuestos entre los que se encuentra el impuesto al cheque, que vence a fin de año.

Al hablar en el recinto de la cámara baja, Rossi consideró "inconveniente" discutir este año "una modificación de la distribución" de la coparticipación, como plantearon varios diputados de la oposición en el marco del debate de la cámara baja.

Dante Gullo en Café Cultura Nación: “Debatir ideas y proyectos es la política con mayúsculas"

El diputado nacional Juan Carlos Dante Gullo disertó sobre Derechos Humanos y Memoria, ante un auditorio que colmó las instalaciones del Centro Cultural El Zaguán, en el marco de Café Cultura Nación, organizado por la Secretaría de Cultura de la Nación.

El referente histórico de la Gloriosa JP resaltó la defensa integral de los derechos que realizan los gobiernos populares, en contraposición a la vulneración de los mismos que siempre llevan adelante los gobiernos que representan los intereses de minorías o de elites.

También destacó con respecto a Los Derechos Humanos y la memoria que "No es solo hablar del pasado, que hay que hacerlo, reivindicarlo, recordarlo, porque todavía tenemos instancias que tienen que ser resueltas a nivel de la Justicia con verdad, condena y castigo a los culpables, pero esta reivindicación significa los Derechos Humanos hoy, los derechos sociales hoy, no sirve de nada dar vueltas en función de reivindicaciones del pasado si este presente nos encuentra todavía con excluidos".


El Diputado Nacional, además, expresó la importancia de "Dar la discusión a todos los que hoy expresan discursos excluyentes desde ciertos medios, desde cierto arco opositor elitista y liberal, desde cierto conglomerado de desmemoriados que fueron los que nos llevaron a una situación prácticamente terminal en el 2001. Y hay que hacerlo como lo sabemos hacer, con los Derechos Humanos, los derechos sociales, los proyectos integradores. Porque las naciones levantadas y de pie, se defienden todos los días, las 24 horas del día, todos los días del mes, todos los meses del año, todos los años".

Finalmente, exhortó a los jóvenes militantes para que realicen su propia experiencia en el armado político: "No voy a hablar de la juventud de los setenta, yo quiero aprender de vos y de chicas como vos, y de compañeros como vos, para ver cómo se unifican ahora y nos enseñan a nosotros a ser distintos".




Texto completo de la Exposición del diputado nacional Juan Carlos Dante Gullo en Café Cultura Nación

“Hoy me convocaron para hablar sobre Derechos Humanos y memoria, dos palabras que significan mucho, van ligadas. Es imposible en una realidad como la Argentina o Latinoamericana desarrollar el tema de los Derechos Humanos como si fuese una cosa en abstracto, o sin la responsabilidad de generar el mecanismo de la memoria.

La memoria no solo determina explicitar que significan los Derechos Humanos sino como se los defiende, se los promociona y se los sincera en función de una realidad como la nuestra, la vivida, y, obviamente, se los incorpora en el presente tratando de generar todo lo que hay que rescatar para bien o para mal.

En mi caso, el tema de la memoria y Derechos Humanos me gustaría que sirviera para que surjan algunas cosas para poder discutir o charlar. Una, es que en la Argentina contemporánea, en nuestra Argentina, que supuestamente significa nuestra práctica, nuestra conciencia, nuestro ideario, nuestras ideologías, se han conculcado o vulnerado los Derechos Humanos cuando gravitaban políticas que iban en contra de los intereses populares. Obviamente, eran los sectores populares que pugnaban por cambios, transformaciones, o los que luchaban por sus reivindicaciones, intereses y objetivos estratégicos, los más golpeados y los que más sufrían en función de hacer tabla rasa con los Derechos Humanos.

Lo contrario también es válido si nos proponemos trabajar. Es en los momentos en que se consolida la democracia, con gobiernos populares, con gobiernos que contienen a las mayorías, donde más se desarrolla desde el Estado, incluso desde el Gobierno, la defensa de los Derechos Humanos. No es casual que en estos últimos años una de las muletillas, una de las críticas que más se le hacen, tanto al gobierno de Néstor como al de Cristina, es levantar la bandera de los Derechos Humanos.

Digo que no es casual porque si analizamos este razonamiento que quiero trabajar con ustedes, si somos aquellos que aspiramos a proyectos colectivos, a proyectos de crecimiento con inclusión, a proyectos que determinen democracias sustentables, sólidas, con participación y protagonismo; a democracias que contengan y generen una reivindicación de los sectores populares, de los trabajadores, es decir, de todos los que sufrimos la vulneración de estos derechos, también es obvio que cuando llegamos estos sectores, hacemos de esto un abc y una defensa importante.

El otro tema que me gustaría que charlemos o que podamos generar un intercambio de ideas, es que de la mano de los Derechos Humanos también están los derechos económicos, sociales y culturales. Y también aquellos gobiernos que se han caracterizado por llevar adelante políticas reivindicativas que hacen a la justicia social, a la defensa de la niñez, a los derechos del trabajo, a la dignidad del trabajo, a la dignidad de la vida en su conjunto, a todos aquellos derechos que son constitutivos y piedra fundamental de un proyecto integrador, son los que no solo tratan de defender la libertad, los derechos civiles y políticos, sino que extienden esto a la defensa irrestricta de todos los derechos.

No hay Derechos Humanos por aquí y una suerte de burbuja en detrimento de lo que significan políticas, incluso desde el estado, desde el gobierno, que no contienen a las palabras igualdad, justicia social, igualdad de oportunidades. Si ambas cosas no van de la mano, o se van recreando en una suerte de cultura, de comprensión de la igualdad y la libertad de las mayorías, del respeto inalienable de lo que significan sus decisiones soberanas, esto obviamente, más tarde o más temprano, se corta.

Este es un tema en el que estamos demorados y tenemos que dar una gran discusión, porque ciertos sectores, desde concepciones liberales o elitistas, hacen una suerte de acopio de lo que significa una suerte de verdad extrema, basada y centrada en la defensa de los derechos civiles y políticos en detrimento de lo que son las posibilidades del conjunto, de las mayorías.

Hay distintas visiones en la sociedad sobre como practicamos la memoria en función de los Derechos Humanos, esto hoy está instalado en nuestra sociedad. Hay ciertas minorías que se creen dueñas de una democracia entre comillas, que significa, también entre comillas, “su” idea de democracia y de gobierno, “su” idea de nación y de pueblo, “su” idea de república, “su” idea de participación, en detrimento de lo que son las mayorías y las verdaderas reglas de juego que determinan qué democracia, qué estado, qué gobierno, qué república.

Y este creo que es uno de los desafíos más interesantes que tenemos los países que, como Argentina, todavía tenemos que avanzar en función de la calidad de la democracia, en contenido, participación y protagonismo a las mayorías populares, o al conjunto de nuestro pueblo, y también en la manera en que vamos adecuando nuestros gobiernos y democracias en función de esas mayorías y de esas necesidades.

En consecuencia, no es para todos válida la palabra igualdad, no es para todos válida la palabra libertad y no es para todos válida la palabra que significa la defensa de los derechos civiles y políticos, de los Derechos Humanos y, obviamente, lo que significa hoy levantar con mucha fuerza los derechos económicos, sociales y culturales. Hay algunos que protestan en función de sus intereses o situaciones de privilegio, pretenden que les tenemos que conceder todos los espacios de sus libertades individuales, que no son otra cosa que sus políticas elitistas y resguardar su participación en detrimento de la participación de las mayorías.

Nosotros concebimos, y por eso este juego que yo hice de que confrontemos si es verdad que cuando los movimientos y los sectores populares desde el llano pugnaban por el retorno de la democracia, o en resistencia, en lucha, por implementar políticas que signifiquen no vulnerar las voluntades de las mayorías, las minorías eran las que en la Argentina vulneraron y conculcaron Derechos Humanos, libertades, vidas.

Y también en paralelo a lo que significa la defensa de los Derechos Humanos, hay una correspondencia con una calidad de vida, con la igualdad de oportunidades para todos los sectores. Yo creo que cuando en la Argentina gobernaron los sectores que hacen un mal uso de la defensa, entre comillas, limitada de los Derechos Humanos, o de la supuesta, entre comillas, Constitución, que no se respetaba, o de la democracia que no se respetaba, ahí se vulneraban atrozmente los Derechos Humanos.

Y se vulneraron las vidas de los habitantes, de todos los habitantes. Obviamente, siempre sufriendo más los sectores postergados, los sectores del trabajo, los sectores populares. Y cuando esas minorías, en nombre de ciertas revoluciones, que venían a traer democracia y Constitución, vulnerando esa democracia y Constitución, generaban políticas que avasallaban Derechos Humanos, también implementaban proyectos económicos que excluían o dejaban afuera a la mayoría. Esto significaba llevar adelante políticas restrictivas donde se vulneraba todo lo que eran los derechos sociales, económicos y culturales de las mayorías.

No voy a hablar de la Constitución del 49 y de lo que significaba para nuestra Argentina hace ya prácticamente 60 años, la implementación de una serie de artículos que llevaban a nuestra máxima instancia institucional, que es la Constitución, los derechos a la niñez, al trabajo, a la ancianidad, en fin, a una vida plena y rica. No es casualidad que después del 55, Convención Constituyente mediante y reforma, y nueva Constitución, lo primero que se hace es vulnerar en esa normativa suprema y magna los artículos que determinaban la igualdad sin límite que se había fijado en la Argentina para todos los hombres y mujeres que habitábamos este país.

Yo dejo esto abierto para las preguntas y respuestas, para la intervención de ustedes y a mí me dejaría más que conforme si podemos trabajar con algunos compañeros de juventud, como desarrollo además de problemática, lo que fue nuestra historia contemporánea reciente y lo que significa el derrotero de los movimientos populares, el rol que les corresponde a los compañeros y compañeras cuando como en una instancia como la que hoy estamos viviendo, que hoy es el Gobierno de Cristina, anteriormente el de Néstor, donde encontramos expresiones que en función a la representatividad y a la legitimidad de las mayorías, hacen de la defensa de los Derechos Humanos un abc.

Y nosotros tenemos que dar la cara y decir sí, estamos en función de lo que es la defensa irrestricta de los Derechos Humanos. Y además, cada uno de nosotros, en un rol militante, responsable, tenemos que hacer de esa defensa prácticamente trincheras, donde se le ponga freno a todo lo que significó el avasallamiento que determinaron minorías, o formas de repensar una Argentina que no tiene que volver.

Nosotros tenemos que ser elementos dinámicos de difusión permanente de lo que significa la reivindicación, la defensa o la denuncia ante el incumplimiento de los derechos económicos, sociales y culturales. Y más allá de si somos oficialistas, menos oficialistas, o como se le quiera llamar, cada compañero, hombre o mujer, que cumple un rol en el Gobierno, o un rol en el Partido, o un rol en el Movimiento, o un rol en la calle, tiene que constituirse en un elemento dinámico y difusor de estas ideas. Como decía Evita: ahí donde hay una injusticia hay un derecho. Y donde hay un derecho tiene que estar uno de nosotros levantando una bandera de lo que significa reivindicar, en primer lugar, a aquel que no tiene y que vive en una sociedad que exige igualdad: igualdad en el trato, igualdad de oportunidades, igualdad en todos los derechos.

No tenemos que perder más, no solo la calle, sino los lugares donde están las necesidades que significan generar desde la memoria la defensa de los derechos: una fábrica, un conflicto gremial, un chico con hambre, un anciano con problemas de salud, un hospital que no funciona, una escuela que se cierra o no hay clases porque no van los sueldos, o la infraestructura está mal, o el edificio se cae, un barrio sin infraestructura, sucio. Hay todavía muchas deudas pendientes en la Argentina, a pesar de los últimos años en que se han generado políticas dinámicas.

Los Derechos Humanos y la memoria es fundamentalmente, no un hablar del pasado, que hay que hacerlo, reivindicarlo, recordarlo, todavía tenemos instancias que tienen que ser resueltas a nivel de la Justicia con verdad, condena y castigo a los culpables (aplausos). Pero esta reivindicación significa los Derechos Humanos hoy, los derechos sociales hoy, no sirve de nada dar vueltas en función de reivindicaciones del pasado si este presente nos encuentra todavía con excluidos, o con injusticias. Si nosotros somos capaces de darle sustento a estos proyectos, no hay idea de economía si no es con inclusión, no se entiende de otra manera.

Hoy, incluso, nos están instalando en un mundo en crisis -por suerte la Argentina tiene las espaldas más anchas-, los mismos gurúes del pasado, las mismas malas intenciones. Lo que significa comenzar a llevar políticas de enfriamiento, políticas elitistas, políticas de exclusión, políticas que además no miran en función del objetivo principal que es el pueblo, que somos nosotros; sino políticas de números, de números cerrados, de números antojadizos, de números de desigualdad, de números de conflicto, de números de avasallamiento de los Derechos Humanos y de los derechos sociales.

Yo creo que estamos ante una encrucijada y en la cancha se ven los pingos. Y nuestros pingos tienen que estar en relación a lo que es hoy este momento muy especial del mundo y de la Argentina. Un momento donde nosotros, hoy más que nunca, debemos desplegar nuestras banderas de igualdad y de libertad, de inclusión, de justicia social, de no querer más chicos pobres, de no querer que haya familias nuevamente en las vicisitudes de la desocupación, o de malos salarios, o de carencia de oportunidades. No queremos carencia de estudio, ni carencia de salud, no queremos ciudades destruidas, porque hasta regiones económicas fueron destruidas en el pasado reciente.

Hace pocos años, seis años atrás, o siete, antes de la crisis del 2001, había economistas y gurúes que decían que ante la situación de crisis de la economía argentina y la imposibilidad nuestra de gobernarnos, o de dirigirnos como Argentina y Nación, hasta era válido rematar parte de la Nación, para que ciertos capitales que venían de potencias extranjeras significaran la posibilidad de cerrar balances en detrimento de territorios, en detrimento de vidas, en detrimento de argentinos y argentinas.

Esto pasó hace poco. Por eso hay que dar la pelea y la discusión a todos los que hoy expresan discursos excluyentes desde ciertos medios, desde cierto arco opositor elitista y liberal, desde cierto conglomerado de desmemoriados que fueron los que nos llevaron a una situación prácticamente terminal en el 2001. Y hay que hacerlo como lo sabemos hacer, con los Derechos Humanos, los derechos sociales, los proyectos integradores. Porque las naciones levantadas y de pie, se defienden todos los días, las 24 horas del día, todos los días del mes, todos los meses, todos los meses del año, todos los años.

Y se defienden como nosotros sabemos hacer: casa por casa, discusión por discusión, con la familia, con los comerciantes, con los pequeños y medianos industriales, con las amas de casa, con todos, en todo lugar. Ahí donde hay uno de nosotros, no importa cuántos son los que están confundidos, desorientados o manipulados, se levanta una mesa, se pone una silla arriba de la mesa y nos subimos arriba de la mesa y de la silla, y comenzamos a dar la discusión (aplausos).

Discutir, debatir ideas y proyectos, es la política con mayúsculas, no la politiquería que nos quieren vender armando esta idea de república aséptica, donde lo mejor que nos puede pasar es que los partidos sean ruinas y donde los supuestos dirigentes surjan del consenso, como decía el periodista Bernardo Neustadt: diez jóvenes brillantes. Con diez jóvenes brillantes por año no llegamos a nada, nosotros no necesitamos a diez jóvenes brillantes, necesitamos millones de chicos y chicas jóvenes que estudien, que se capaciten, para volver a reestablecer la discusión de lo que es la salud pública, la escuela pública, volver a recuperar los espacios públicos. La militancia sin espacio público no es militancia, es gerenciamiento, es seguidismo, es oportunismo (aplausos).

Y la militancia como elemento hacedor de definición de proyectos es volver a las fuentes, es volver a abrir los cauces a las nuevas generaciones, es volver a reivindicar a los sujetos de la historia, a los actores sociales que dinamizan, trabajadores, sectores populares, las mujeres, todos en función de una idea colectiva que signifique, en estas aperturas generacionales y en este llamar a las cosas por su nombre, volver a mover el banco de suplentes. Para generar desde los nuevos semilleros la posibilidad no solo de definir un proyecto de país, sino tener a nuestros dirigentes, hombres y mujeres jóvenes, que sean los que se pongan a la cabeza de lo que tiene que significar la agresiva política de una Argentina que tiene que darle a sustento a su democracia, a su justicia social, a su independencia económica y a su soberanía política. Muchas gracias, podemos abrir el debate”. (aplausos)




Pregunta del auditorio: Estoy absolutamente de acuerdo con usted, pero a mí me preocupa que en este gobierno, que para mí está haciendo las cosas bien, está lleno de esos funcionarios que van a volver a traicionar, porque ya se hizo...

Dante Gullo: (Risas) Entiendo la pregunta, pero no sé cuáles son los funcionarios, pero debe haber, debe haber. No caben dudas de que todavía la abuela no separó las lentejas buenas de las malas, no. En un kilo siempre hay que separar algunas lentejas, pero bueno para separar las lentejas malas también hay que ser ambicioso en el guiso que uno quiere preparar. Pero como dije antes: si no provocamos la apertura de las nuevas generaciones, si no convocamos a los sectores que son determinantes en función de un proyecto que los integre y que además los contenga, me refiero a los sectores del trabajo y la producción.

Hoy estamos en el 2008 y dadas las vicisitudes que vivimos como república y como continente, no somos capaces de apreciar que en estos años se han conformado otros actores que también hay que escuchar, algunos minoritarios, otros con situaciones específicas. Cuando fue toda la crisis previa al 2001 aparecieron cartoneros, clubes de trueque, familias que se nucleaban en defensa de la escuela pública, papás que se ponían de acuerdo y uno llevaba a la escuela a varios chicos, porque otros tenían que trabajar o estar pendientes de una changa. Barrios que se sumaban a instancias organizativas a nivel no solo de la seguridad sino también de otros aspectos de la vida comunitaria, porque la gente no tiene las posibilidades pero no pierde la cultura de la solidaridad.

Todo esto tiene que ser interpretado y a la vez asumido por nosotros para generar los nuevos canales para que haya participación, para que haya otras representatividades, de esa manera vamos a ir achicando el margen de error y vamos a poner en evidencia lo que significan algunos o algunas que no están a la altura de las circunstancias.

En la medida que vayamos generando los canales de representatividad se achica mucho la posibilidad de que cuando uno llegue, el nivel del escritorio te maree y te mandes alguna puercada. Más, yo creo que entramos en una etapa diferente del mundo y de la Argentina y hay que apurar el paso porque tenemos que cerrar la brecha entre lo que decía Néstor Kirchner cuando asumió: que él no asumía para dejar las convicciones o las conductas en la puerta de la Casa de Gobierno, sino muy por el contrario llevarlas en función de la tarea permanente. Yo creo que viene un mundo distinto, la Argentina obviamente va a observar por coletazos, o por una necesidad de observación cultural y de vivencia a este mundo en cambio.

En esta etapa que se abre, yo digo que la nueva militancia no solo tiene que tener conducta y convicciones, también tiene que estar imbuida de mucha solidaridad y amor. Los nuevos militantes tienen que ser una mezcla de Evita, del Che Guevara, pero también de San Francisco y de Sor Teresa. Porque vamos a entrar en una etapa en que quizás sea necesario tener que repartir el pan y persuadir a la sociedad de que quizás tenemos que repartir los panes, previo milagro de que primero hagamos que aparezcan los panes.

Y todo esto en un mundo que además nos tiene que dar a nosotros una categoría de representantes y funcionarios que tengan que dar el ejemplo. Quizás el funcionario no tiene que repartir el pan, tiene que decir no, yo paso, coman ustedes.

Auditorio: Soy Paulita, militante en la Unidad Básica Salvador Gullo ¿Quisiera saber cómo fue la unificación de la Gloriosa JP y cómo nos ve a la juventud hoy en esa tarea?

DG: ¿No querés preguntar nada más? (Risas) No te voy a poder contestar porque sería salir del contexto y de tema, pero quizás eran épocas como estas ¿no? Donde también la solidaridad y esta nueva calidad de cuadros, de militantes, tienen que empezar a pensar en función del todo, del colectivo y no en función de uno o de un grupo. Más allá de que, obviamente, uno tiene que estar pendiente de las listas electorales, del cronograma electoral, hay un día a día que significa una construcción colectiva. Yo creo que hay que entrar en ese terreno y no asustarse. También nos metieron desde un discurso, o desde un manipuleo liberal, antojadizo, el fin de las ideologías, el fin de las ideas, el individualismo, el sálvese quien pueda, y pareciera que todo lo que uno dice en términos de patria, de pueblo, de nacionalismo, de popular, de revolucionario, de rescate y revisionismo de la historia, es como que son cosas fuera de uso.

Nos quieren hacer entrar en una suerte de zapping individualista donde, obviamente, ni se salva uno, ni se salva todo. Es más, nos caemos todos. Así que bueno, ese proceso de reunificación respondió en mucho a ese proceso de crecimiento, ese proceso de apertura de conciencia y toma de posturas, que vino a romper con los esquemas individuales y asumir el colectivo. Y yo creo que hay que hacerlo, está en línea con esto que decía: hay que entrar en otra etapa. Además los argentinos y argentinas en muchas cosas tenemos que hacer un esfuerzo, la solidaridad y el amor como yo hablo, no son valores cerrados, son valores dinámicos.

Hay que también pensar y repensar que entramos en una etapa donde hay que defender el pleno empleo, el trabajo de todos. Argentina tiene que generar producción, Argentina, junto a Latinoamérica y los países del Unasur, tiene que cumplir un rol determinante. Esto va a significar, además, definir qué comemos y qué exportamos. Y qué comemos también hay que hacerlo con un sentido de solidaridad.

Hace poco contaba en un reportaje que a veces le digo a mi hijo: -¿Para qué pedís una gaseosa más, la vas a tomar? Si no la vas a tomar, no la pidas. Porque muchos de nosotros venimos de una cultura donde la comida no se tiraba. A mí de chiquito me enseñaban en mi casa que lo que quedaba se comía después. Y también me decían que antes de tirar un pan a la basura había que besarlo, porque tenía un valor simbólico todo eso. Si uno se pone a ver en la Argentina, hoy, en este marco que nos quieren hacer esta sociedad consumista, fashion, de los lindos, de las lindas, con ruido, música, luces, que no está mal, todos tenemos acceso a una calidad de vida diferente y digna, el Peronismo es eso, son sociedades que se equilibran hacia arriba, sociedades con sencillez, felices.

La revolución no era para sufrir, era para ser feliz. Pero acá hay que empezar a comprender que no se pueden tener todas las luces encendidas a la noche, ni coches grandes con un solo tipo manejando, pero bueno, es una cultura, hay que aprender. Porque cuando más ahorremos, si ocurre una situación de desigualdad y tenemos hermanos, hermanas, compatriotas, que no pueden o no tienen acceso, hay que comenzar ya a trabajar un fondo, o reserva, que signifique que con el gran ahorro de la mayoría podamos asistir a aquellos que están fuera del pueblo.

Más, yo no voy a hablar de la juventud de los setenta, yo quiero aprender de vos y de chicas como vos, y de compañeros como vos, cómo se unifican ahora y nos enseñan a nosotros a ser distintos.

Auditorio: Yo soy de Almagro y siento que está en peores condiciones que otros barrios que tienen más mantenimiento como Palermo o Belgrano ¿Qué podríamos hacer para mejorarlo?

DG:
Almagro, Almagro de mi vida. Almagro es un barrio con mucha historia y tradición. Yo creo que igual corremos parejito en todos los barrios, tenemos que entrar nuevamente en un proceso de generar relaciones, marcos de reciprocidad, de solidaridad. Por ahí en algunos sectores o barrios de clase media se cayó en la creencia de que uno iba a la góndola, agarraba el frasquito y mágicamente se solucionaba todo. Y hay que volver a la cultura que significa la inserción, la historia, la cultura. Además, yo creo que Almagro está bien politizado.

También hay un proceso en estos últimos años en el cual las grandes urbes generaron en función del humor de cierta clase media, frases como “y, por algo será”, o “yo no fui”. Y ante lo que fue la crisis tan profunda que nos llevó al 2001, en lugar de pensar en función colectiva y de conjunto, cada uno dijo: “y, por ahí yo zafo”. Y ese “por ahí yo zafo” en función de cierta remuneración, de cierto nicho, hace que uno se encierre en sí mismo. Igual, yo creo que a la corta o a la larga, la tradición y cultura de nuestro país y de nuestras ciudades, en función de lo que es nuestra conciencia política, va a despertar. Y ahí se va a dar nuevamente la búsqueda de lo público: el espacio público, que es el barrio, con todo lo que implica, hasta todo lo que ese barrio tiene que disponer en función de sus ciudadanos y ciudadanas. Pero vamos, vamos, vamos por Almagro y vamos por todos los barrios, calculemos que venimos de un año en que el 60 por ciento votó al que hoy gobierna la ciudad. No es un tema menor, tenemos que dar una discusión, a veces nos dormimos en los laureles, nos cruzamos de brazos. Hace un año que esta ciudad está haciendo agua.

Si cualquiera de nosotros estuviese haciendo las definiciones que hace el actual Jefe de Gobierno, que después recoge la piola, que después yo no fui, que después va manejando todo con emparchados. Bueno, ahora depende de nosotros. Hay que retomar el tema de la defensa de la descentralización de las comunas, el presupuesto participativo. Además, hay que generar la idea de que la ciudad no es un coto cerrado, es una ciudad que tiene que estar abierta a todos sus habitantes, abierta a la región metropolitana, abierta a lo que significa Buenos Aires como una especie de luz cultural, como elemento de salud, como elemento educativo, que a la vez se complemente y se integre con las provincias y el resto de los países latinoamericanos.

Todavía nos encontramos algunas veces, y uno se hace el distraído porque no puede dar todas las discusiones, con algunos compañeros, compañeras, hombres y mujeres, que no quieren un boliviano caminando por ahí, un peruano, un paraguayo, un uruguayo, un brasilero, pero ¿dónde estamos viviendo? Por un lado hablamos de Unasur y por otro lado después hacemos discriminación. Incluso, la otra vez escuché espantado a un grupo de gente que decía que había un grupo de una provincia que pululaban y ensuciaban todo. Estamos todos locos. ¿Es así la idiosincrasia del argentino y del porteño? No, no es así, porque cuando después uno se pone a analizar algunas cosas, Buenos Aires, sobre todo, ni es agresiva con el interior, ni con los países limítrofes.

Y hoy Buenos Aires está caracterizada como una ciudad donde, incluso para el turismo, cada uno puede hacer lo que tenga ganas, nadie molesta a nadie, al contrario. Pero bueno, habrá que estudiar y ver por qué se generan algunas instancias donde aparece la discriminación, o el sálvese quien pueda.

Auditorio: Mi nombre es Delfina y soy militante de la UES y del Peronismo. En los últimos meses hubo una suerte de resurgimiento de una gran movilización de estudiantes secundarios en la Capital a raíz de las políticas de destrucción pública del gobierno de Mauricio Macri, especialmente en el tema del recorte de las becas, y nos preguntábamos con los chicos de la UES, como puede ser que una generación que nació en los 90 como nosotros, que hoy salgan a defender los derechos sociales, los Derechos Humanos y algo tan básico como es la educación pública, porque creemos que esto es un gran logro, una transformación muy grande. Por eso te queríamos preguntar a vos qué pensar de nuestro rol en la política, en la militancia, y sobre que hoy se esté levantando una bandera como la de la UES?

DG:
¿Te puedo preguntar de que colegio sos?

Auditorio: del Fernando Fader.

DG: Uno de mis hijos tuvo una nenita hace poco y le puso Delfina, un par de días atrás. Mirá, de las cosas que pasaron en los últimos meses a mí me pareció que hubo dos o tres que fueron muy importantes y que iban a determinar el rumbo del 2009, del 2011 y un poco más. No sé si ustedes son concientes que por suerte estamos metidos en una agenda política muy cargada, a diferencia de unos años atrás en los que no se podía hablar o discutir muchas cosas, porque todo se resumía a que venía la misión del Fondo Monetario, iba a determinar cuánto era el ajuste y en función del ajuste, te embocaban. Nadie podía protestar y los que lo hacían era en solitario. Digamos que la pre-pizza venía premoldeada. Ahora, desde hace unos años, hay una agenda política, está cargada, está abierta, incluso a mí me entusiasmó y sigo de cerca todo lo que significó la irrupción de Carta Abierta, todo lo que significó ahora en función de este tema de las becas y la política del macrismo, en función de una idea distorsionada, antojadiza e ideologizada desde la derecha de lo que es la escuela pública, la participación de los estudiantes. Yo no sé si ustedes son concientes, pero yo vengo rumiando desde hace años, incluso con la aparición de Néstor y ahora con Cristina, que hay una franja de la sociedad que está pidiendo pista, esa franja fundamentalmente yo la vi el primer 25 de mayo del acto grande en la Plaza de Mayo, ¿no sé cuánto hace, dos años? Vi también a toda esa gente linda, joven, que además obviamente sabía porqué iba, en uno de los actos contra la guerra gaucha, que fue también una Plaza de Mayo que estuvo desbordante. Y, obviamente, seguí de cerca todo el rol que le cupo a la juventud en esto de las becas. Yo estoy esperando que ustedes den el todo, yo, todos estamos esperando eso. Yo creo que hay una Argentina que está trabajando una nueva predisposición de militancia y compromiso político. Quizás no estamos a la altura de las circunstancias ciertos niveles de dirigentes, o no sabemos abrir los portones, o no sabemos acoplarnos y acompañar lo nuevo. Pero que lo nuevo está, está. Ahora como yo les digo a muchos compañeros: nadie te va a regalar nada. Ni nosotros que supuestamente jugamos de progre, de abierto y demás. Nadie a la juventud le va a regalar nada. Si la juventud no agarra y ocupa el rol y toma con decisión e inteligencia este momento, desde arriba no te van a dar nada. Pero no digo desde arriba en forma canchera, desde arriba no es Néstor o Cristina, o un grupo de dirigentes, desde arriba es una idea que hay que desterrar que es la del aparato, que es el voluntarismo y el facilismo. Yo creo que ayer como hoy, y yo pienso siempre en estas cosas que te dicen ¿Qué diferencia hay entre la juventud de los setenta y la de los ochenta? Y qué se yo, comparaciones antipáticas no. Yo en esto siempre aplico ese proverbio árabe que los hijos se parecen más a su tiempo que a sus padres. El tiempo de ustedes es este, si no lo aprovechan ustedes, fuimos.

Auditorio: Cuando se hizo la reunión de presidentes americanos en Mar del Plata hubo un pequeño pero amable desacuerdo entre Néstor Kirchner y Fidel Castro sobre el índice de mortalidad infantil en la Argentina ¿Quisiera saber si en este momento se dispone de un valor actualizado y confiable?

DG: La verdad que no conozco bien ese contrapunto, pero debe haber existido. En realidad, desde el 2001 a la fecha todas las variables en términos económicos y todas las variables que determinan realidades sociales, educativas y de salud, determinan que hubo un proceso de recuperación muy interesante en la Argentina. Igualmente esto no quiere decir cerramos la discusión o el debate, Argentina todavía tiene discriminaciones muy grandes, a mí me gustaría que ese contrapunto si existió hubiese significado que el error no era en función de más o menos chicos nuestros muertos, o con hambre, o con limitaciones, pero no te puedo contestar integralmente la pregunta porque no conozco ese contrapunto y porque no conozco las cifras.

Auditorio: Creo que venimos sosteniendo una batalla cultural desde el 76, y creo que en el conflicto con ese campo privilegiado quedó un poco en evidencia la falta de cuadros dentro del gobierno como para defenderlo, ¿cómo ve las relaciones de fuerza en las próximas discusiones que pueden ser mucho más fuertes como la nueva ley de radiodifusión?

Auditorio: Vos hablabas de que vivimos un momento de cambio y una gran crisis mundial, que también puede generar una oportunidad, ¿cómo ves las perspectivas de nuestro país y de nuestro continente?

Auditorio: ¿Cómo se puede lograr que los jóvenes participen más activamente, ya que si bien se ve a muchos jóvenes trabajando con ganas, no llega a ser lo que pasaba con la generación de los setenta, qué le falta a este gobierno para terminar de convencer a los chicos de hoy?

DG: Bueno, las tres preguntas, aunque diferenciadas, se pueden llegar a explicitar. La relación de fuerzas era compleja ayer y sigue siendo compleja hoy. Una relación de fuerzas es una construcción, pero además, con respecto a la última pregunta, no es atributo de este gobierno el generar adhesiones por las adhesiones mismas, es una construcción política, colectiva. Muchas de las críticas que se centran sobre lo que supuestamente son una actitud de gobierno como el doble comando, que no dialoga, que abre muchos frentes, son todas, digamos, críticas o palos en la rueda, que obviamente responden al núcleo central de esto. Esto que estamos viviendo hoy como experiencia, antaño lo vivimos en otros gobiernos que llevaban adelante proyectos integradores, proyectos de inclusión, proyectos que iban dirigidos a las mayorías populares, proyectos que además defendían el trabajo, una idea de un país que no solamente tenía que ser agro ganadero exportador, sino a su vez diversificar su producción, industrializarse, un país democrático. Para llevar adelante un proyecto de país como el que hoy tenemos hay que armar, hay que convencer, hay que persuadir, como decía Perón. No hay posibilidad de llevar adelante un proyecto de país que genere como hace unos días las jubilaciones de reparto si no hay consenso.

Ahora cual es la diferencia entre los grupos elitistas, entre los grupos que critican que la cartera, que el vestido, que el saco cruzado, y lo nuestro. En la Argentina como en muchos países del mundo, está muy demostrado que es más fácil destruir que construir. Es más fácil manejar las elites en entendimiento con los factores de poder económico y financiero y los medios, que ir a buscar el consenso a nivel de los barrios, los sectores sociales que le dan sustento a un proyecto. Nosotros estamos en una necesidad de todos los días, como decía Perón, al acostarnos preguntarnos qué hice hoy para que las relaciones de fuerza sean mejores, que hice hoy para poner en evidencia y desnudar a estas minorías de privilegio que quieren volver a generar una instancia de conflicto, de destrucción, de entrega. Qué hice hoy para que mi vecino cuando yo entro y salgo de casa, con entusiasmo diga: -loco, esta la ganamos, vamos todos a la plaza. Acá vamos a defender la fuente de trabajo, acá vamos a defender la plena ocupación, que no nos toquen a Cristina.

A mi todavía hoy me gustaría generar locales abiertos, centros culturales, saltar como pelotitas de ping pong y vamos todos, vamos por más, y que en cada agrupación hoy seamos veinte y mañana cuarenta, y de acá a un mes que aparezcan doscientos. Hay que tocar timbre, hay que golpear puerta por puerta, ¿saben cuántos estudiantes sacó Obama en los distintos estados de norteamérica a timbrear? Dos millones. Fue parte también de la elección. Dejemos de lado la maquinaria perfecta de última tecnología política aplicada a una campaña electoral, pero el último aguante, el último aliento, se manifiesta en el convencimiento de decirle a alguien que sale de la casa: -A Obama ponele la papeleta! El entusiasmo es una convicción, la convicción es una conducta, la conducta es una postura ideológica y política, la postura ideológica y política es un proyecto de país, un proyecto de país es una identidad, una identidad es una pertenencia, la pertenencia se hace un colectivo. Vamos, vamos, ¿somos todos o no somos todos? (aplausos)

Y hoy estamos mal, pero uno se pregunta: ¿Quién está enfrente? Y ves al multimedio La Nación, ves ciertos sectores a los cuales pasás lista y te preguntás: -¿Dónde está la parada del colectivo que va para el otro lado? Pero a pesar de esto, que yo digo agrandado que estamos mal (risas), lo digo agrandado porque tenemos todos los elementos para volver a recuperar una experiencia histórica, que tiene nada más y nada menos en función de su síntesis más acabada, 63 años. Y por más que nos digan que somos impresentables, por más que nos digan que somos ese aluvión que toma todo, por más que nos digan que tiene que terminar esta locura de la identidad nacional, popular y revolucionaria, en el fondo también nos dicen que cuando llega el momento de las decisiones de la Argentina, las papas del fuego se sacan con ideología y con política, con conducta y perseverancia y con militancia (aplausos).

Nosotros tenemos historia, nosotros tenemos cultura, nosotros tenemos raíces, tenemos además y yo me siento orgulloso, porque voy a algunos lugares y me quedo tranquilito en un rincón y miro: cuadros, militantes, hombres y mujeres, reservas que todavía no hemos echado mano, que una vez que se pongan a funcionar, esta maquinaria es imparable. Lo que pasa que, obviamente, ese encanto de saber que uno está confiado yendo para adelante porque adelante tuyo van otros y detrás también. Ese encanto del colectivo en marcha, del pueblo con conciencia, de la capacidad de que vos mañana te quedaste dormido a las dos de la mañana, porque ya no das más, pero uno sabe que a esa hora hay un compañero pintando, otro que está preparando en el amanecer la ida a la puerta de una fábrica, el otro que está preparando el speech para la oficina, el otro que está preparando su debate en el parlamento, el otro que está arengando a los compañeros en la fábrica, el otro que está en la escuela, el otro que en las universidades dice: ¿cómo no se puede?

Vamos a armar y a organizar esa multiplicidad de cosas que son locales abiertos, gente tocando timbre, gente pegando afiches, gente pintando paredes, gente pensando proyectos y romper este círculo vicioso, con gente que vuelva a decirle al compañero o la compañera: -No, yo no, vos sos el que tiene que ir en la lista, porque vos tenés más elementos y te lo ganaste y yo voy a luchar para que todos estemos detrás tuyo y darte la mano para que seas el mejor legislador, el mejor diputado, el mejor funcionario, el mejor compañero a cargo de un local.

Si en la Argentina esta nueva cosa que se llama militancia, esta nueva cosa que significa elevar la política en función de las nuevas transformaciones, no lo hacemos nosotros, yo pongo en duda hoy a la oposición y a ciertos factores de poder, que por más que pongan palos en la rueda, les va a ser imposible manejar lo que ya es esta conciencia abierta del pueblo argentino. Este pueblo no va a volver a índices de desocupación de dos dígitos, no va a volver a estar expectante de las misiones del Fondo Monetario, no va a volver a la idea de que un grupo exporta y el resto tiene que mirar con la ñata en la vidriera. Esta Argentina ya está.

Yo a veces hablo con algunos compañeros gremialistas y les digo: compañeros ¿cómo puede ser? En el 2001 había un índice de desocupación de casi el 30 por ciento, un nivel de indigencia también altísimo, había algunos gremios cuyas seccionales habían desaparecido, calzado, la Unión Obrera Metalúrgica había quedado en 40.000 afiliados en el 2001, con una obra social con concurso de acreedores. Desde el 2003 en adelante comenzamos un proceso de recuperación, donde nuevamente se abrieron fábricas con 15 ó 20 mil operarios.

Y yo siempre cuento como ejemplo, que el año pasado, en el acto del 17 de octubre que se hizo en La Matanza, en una escuela fábrica recuperada, donde nuevamente se instrumenta en La Matanza la recuperación de lo que son las capacitaciones a nivel de los trabajadores. Y ese día, habló el ministro Tomada, habló el intendente de La Matanza y habló un compañero delegado de la fábrica que significaba el por qué del nombre Tomasini a la escuela que estábamos inaugurando. Tomasini era un delegado de fábrica que en el 76 fue detenido desaparecido. Este compañero, ahí estaban Cristina candidata, Néstor y todos en un estrado, y abajo estábamos un grupo de compañeros y muchos dirigentes gremiales. Cuando habla este compañero de 23 años, delegado de la fábrica donde fue chupado Tomasini, bajó una línea fabulosa, explicó con pocas palabras de donde veníamos, que estaba pasando con la recuperación del trabajo, cual era ese presente próspero donde un hombre a los 23 años tenía asegurado el trabajo.

Cuando un hombre a los 23 años tiene asegurado el trabajo, o la gente tiene asegurado el trabajo, ve el futuro de otra manera. Porque ya piensa en su casa, en invertir, en generar la idea de papá, mamá, los chicos, la familia. Fue brillante. Cuando terminó de hablar este trabajador, Cristina se le acerca y le preguntó, yo no lo escuché pero le leí los labios. Le preguntó: ¿Cómo te llamás? ¿Cuántos años tenés? Entonces cuando habla Cristina le dice al Presidente: -Presidente, este compañero hoy tiene 23 años y nos dio una lección de lo que significa la defensa de la dignidad del trabajo, lo que es esta Argentina en crecimiento, lo que es esta Argentina donde apostamos a la industria, donde nuevamente apostamos al trabajo. Este compañero tiene 23 años, la misma edad que tenía Tomasini cuando lo hicieron detenido desaparecido.

Con esto lo que quiero decir es que tiene que haber hoy muchos 23, 21, 19, 16, 25, 30, muchos trabajadores que expliquen, que defiendan esto que ha significado la nueva posibilidad de recuperar fábricas, regiones económicas que habían sido arrasadas, puestos de trabajo que parecía que estaban colapsados y nunca más, pero tienen que expresarse, tenemos que ir a buscarlos y decirles: animémonos, vayamos. Millones de nuevos compañeros son los que tienen que explicar esta nueva realidad que se provocó en la Argentina en estos años. No lo van a poder explicar los gordos, los gordos siguen pensando en Carlitos, en la Argentina que obviamente no exportaba y deme dos, en la Argentina de la baratija, en la Argentina donde pocos se la llevaban y muchos la tenían que mirar desde abajo.

Necesitamos esta nueva camada de dirigentes, no solo por juventud, sino porque pueden explicar con tranquilidad y sin prejuicios y sin ponerse colorados, porqué van a defender esto. Si ustedes están observando en estos últimos meses todos los discursos de Cristina y de Néstor están en función de llevar hasta las últimas consecuencias la defensa del pleno empleo en la Argentina. Hay palabras que están erradicadas desde el oficialismo: enfriamiento de la economía, no; achique, no; ajuste, no; despidos, no; baja de salarios, no; qué más, ésta es la vida. En un mundo en que honestamente viene mal la mano, vamos a ver cosas muy difíciles en países centrales, incluso en algunos países del Unasur.

Y ahora tenemos que estar como dice la canción del tablón: todos para uno y uno para todos, ahora se ve el colectivo y el proyecto y las ideas en función de ese colectivo. Ahora nosotros tenemos que empezar a correr a todos los gurúes que llevaban adelante una prédica hasta hace meses donde Argentina no solo iba a colapsar sino que estaba en default. Donde Argentina parecía que iba a estallar en función de una crisis que ellos solo veían. No puede ser que aceptemos la desmemoria de cierta dirigencia que nos llevó al 2001 y habla como si no hubiese pasado nada. Y el 2001, nos guste o no, está ahí a la vuelta en nuestro pasado reciente y nos sigue tocando.

Ahora, hay que animarse a dar la confrontación, ¿es difícil? Y sí, claro, te tiran con Clarín, te tiran con La Nación, te tiran con los medios, cada uno nuestro que van a los programas, van diez de los otros, y hablan, hablan, y hablan. ¿Pero sabés qué? Si la cosa es hablar por hablar, tampoco van a ganar. (aplausos)



Exposición y debate realizados en la Ciudad de Buenos Aires, el lunes 24 de noviembre a las 19 horas, en el centro cultural El Zaguán, en el marco de Café Cultura Nación, organizado por la Secretaría de Cultura de la Nación.

viernes, 21 de noviembre de 2008

Dante Gullo en Café Cultura Nación


El lunes 24 de noviembre a las 19 horas, el diputado nacional Juan Carlos Dante Gullo participará en Café Cultura Nación, el programa que promueve espacios de encuentro y reflexión sobre la cultura argentina tomando como punto de partida la convicción de que la información, el diálogo y el debate son herramientas imprescindibles para la construcción de una sociedad democrática y participativa.

En la ocasión el Diputado Nacional expondrá sobre Los desafíos de la juventud en la Argentina del Bicentenario, La militancia de los setenta y el surgimiento de "La Gloriosa JP", Néstor Kirchner y el fortalecimiento de los partidos políticos y Cristina Fernández de Kirchner y el fortalecimiento de la democracia.

La reunión, con entrada libre y gratuita, se realizará en El Zaguán, Moreno 2320, Ciudad de Buenos Aires.

lunes, 17 de noviembre de 2008

El 17 de noviembre de 1972, por Juan Carlos Dante Gullo


Ese día sentíamos que estábamos haciendo historia y no nos equivocamos. Es que el pasado reciente sintetizado en 17 años de resistencia peronista podía cambiarse por un presente donde el desafío era la unidad de los numerosos sectores nacionales y populares, y un futuro que iba a estar supeditado a lo que pasara en esa histórica jornada. Para nosotros era claro; si Perón volvía se terminaba una etapa de resistencia y empezaba un proceso de transformación y revolución. Detrás de la consigna del “Luche y Vuelve” organizamos y unimos a la mayoría (casi todos) de los grupos de JP dando nacimiento a la “Gloriosa”, que a partir de entonces hegemonizará la movilización popular y la presencia en los barrios, fabricas, talleres, escuelas, colegios y universidades. Con este panorama, el futuro era nuestro e iba a ser una patria grande con inmensos cambios en donde podríamos avanzar en la construcción de una nación económicamente libre, políticamente soberana y socialmente justa. La revolución peronista y argentina, de alguna manera truncada en septiembre del 55, continuaba su curso con renovados bríos y con nuevos actores. No nos equivocamos. Si con Perón en Madrid, pudimos reorganizar el movimiento peronista, con nuestro conductor en el país, las cosas iban a ser mucho más fáciles.

La historia es conocida. Perón descendió del avión de Alitalia en Ezeiza, en un día de intensa lluvia. La noche anterior no durmió nadie ultimando los preparativos para ir a buscarlo al general. Los recuerdos, indelebles, son hermosos. Desde los barrios se movilizaron todos, mujeres y hombres, niños y ancianos, trabajadores y empresarios. Nadie quería perderse ese momento tantas veces soñado y por el cual habíamos luchado tanto. Cualquier medio de transporte servía; colectivos, camiones, autos, bicicletas, o a píe. Era un nuevo 17 de Octubre. Volvíamos a rescatarlo a Perón. A Ezeiza se movilizó una marea humana.

Un fuerte y desproporcionado operativo militar se interponía entre el pueblo y el reencuentro con Perón. Nos reprimían con gases y tiros al aire, nos mostraban los tanques. A nosotros no nos paraban con nada, nos dispersábamos y volvíamos a juntarnos, una y otra vez. Atravesábamos los campos, cruzábamos los innumerables brazos de río Matanzas una y otra vez. Pero no nos detenía nada ni nadie. Pensábamos en los bombardeos de junio del 55, en la lucha heroica de Villa Manuelita, de los obreros de La Plata, de Avellaneda, de Rosario; en Juan José Valle y Cogorno, en los fusilados de José León Suárez, en los presos Conintes, en el absurdo decreto 4161, en Felipe Vallese, en Abal Medina y Ramus, en los Mártires de Trelew, en Capuano Martinez, en el Negro Sabino Navarro y en tantos otros compañeros que habían hecho posible este momento. Recordábamos la parábola de Perón: “Los pueblos siguen la táctica del agua; las oligarquías, la de los diques que la contienen, encauzan y explotan. El agua aprisionada se agita, acumula caudal y presión, pugna por desbordar; si no lo consigue, trabaja lentamente sobre la fundación, minándola y buscando filtrarse por debajo; si puede, rodea. Si nada de esto logra, termina en el tiempo por romper el dique y lanzarse en torrente. Son los aluviones. Pero el agua pasa siempre; torrencial y tumultuosamente, cuando la compuerta es impotente para regularla”. Éramos el aluvión y lo trajimos a Perón.

Y con Perón, volvía la democracia, la practica política de las masas que se nos venía escamoteando desde el 55. Sabíamos que en el terreno de la política, de la militancia, no teníamos oponentes, éramos invencibles, porque nuestra causa era justa y éramos la abrumadora mayoría del pueblo.

A partir de ahí continuó un proceso maravilloso. El régimen militar apeló a una última treta de jugador tramposo e inhabilitó de nuevo a Perón para ser candidato. Desde la gloriosa JP impulsamos la candidatura de Héctor Cámpora, un hombre leal que tenía las ideas bien claras. La campaña “Cámpora al gobierno, Perón al poder” movilizó a miles, millones de jóvenes a lo largo de todo el país. Era nuestra oportunidad y no la desaprovechamos. Reventamos las urnas y el pueblo volvió a ser feliz. Volvía el peronismo al gobierno, volvía el pueblo al poder. Después los acontecimientos se desenvolvieron de una manera un tanto veloz, y en muchos casos nos faltó algo de comprensión y de experiencia política (no podíamos tenerla después de tantos años de proscripción) para poder resolver algunas cuestiones. Tal vez nos faltó interpretarlo mejor a Perón, escucharlo más, leerlo “entre líneas”. Pero los genios son así y Perón estaba adelantado a su tiempo. Lo que queda claro es que nos jugamos enteros, no nos guardamos nada, nos entregamos todo. Éramos como los fanáticos que exaltaba nuestra Evita. Ella decía: “Soy fanática, daría mi vida por Perón y por el pueblo... fanáticas quiero que sean las mujeres de mi pueblo. Así, fanáticos quiero que sean los trabajadores y los descamisados. El fanatismo es la única fuerza que Dios les dejó al corazón para ganar sus batallas. Es la gran fuerza de los pueblos: la única que no poseen sus enemigos, porque ellos han suprimido del mundo todo lo que suene a corazón”. Y si nosotros, la generación del 70, hemos ofrendado tantos de nuestros mejores hombres y mujeres, si nos han perseguido de esa manera; ha sido por nuestros aciertos, no por los errores, que por cierto, hemos cometido.

El devenir histórico demostró que teníamos razón. Por eso volvimos. El peronismo está hoy más fuerte que nunca y se sigue nutriendo de nuevas generaciones. Los jóvenes que hoy están organizando la JP no tienen nada que envidiarnos a nosotros. Al contrario. Nosotros lo teníamos a Perón. Ahora están Néstor y Cristina Kirchner acompañados por los hombres y mujeres de la generación del 70, más maduros y experimentados, y acompañados, claro está, por el ejemplo de miles de compañeros que dejaron su vida para que podamos vivir en un mundo más feliz.

Este momento que estamos viviendo, es similar al de octubre del 45 y similar a noviembre del 72. Estamos fundando la nueva Argentina. Con la llegada de Néstor Kirchner al gobierno en 2003 se le puso fin a más de 25 años (con sus matices) de políticas antipopulares. Él en esa ocasión nos dijo que pertenecía a una generación diezmada y que no pensaba dejar sus convicciones en la puerta de la Casa Rosada. También nos convocó a compartir un sueño. Ese es nuestro presente, el sueño de hace algunos años.

Hoy con Cristina Fernández de Kirchner, estamos en la obligación de construir una Argentina en serio y para todos y de lograr con nuestra militancia que nuestras utopías de hoy sean la realidad del mañana; por nuestros niños, por nuestros ancianos, por nuestras mujeres y hombres de esta bendita tierra. Este 17 de noviembre, volvamos a buscarlo a Perón. Sigamos llenando de contenido popular a la democracia y a sus instituciones. Démosle más democracia a la democracia y más peronismo al peronismo.
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